martes, 4 de octubre de 2011

CAPÍTULO 12: EL MODELAJE DEL GENOMA SOCIAL Y LAS MEGATENDENCIAS MUNDIALES

Si bien la implementación del nuevo paradigma de modelaje del genoma social permitiría lograr niveles de desarrollo integral a nivel de los espacios y redes sociales donde se implementa, sus implicancias a mediano y largo plazo a nivel global son todavía más esperanzadoras, considerando que este sería también un catalizador y ordenador de los grandes procesos o megatendencias mundiales, dado su poder recursivo y generador de negetropía.

Pensadores sobre el futuro, entre ellos Peter Drucker[1], Alvin Toffler[2] y John Naisbitt[3], pronosticaron con mucha precisión sobre las actuales megatendencias que se vienen produciendo a nivel mundial, siendo La Globalización, La Liberalización, La Creatividad, La Virtualización y el Empoderamiento las que más consenso generan en cuanto a su actual ocurrencia, más allá de nuestras posiciones ideológicas o las creencias políticas, sociales o religiosas que tenemos al respecto.

Pues bien, con el fin de entender las relaciones y consecuencias de la interacción del nuevo paradigma de “modelaje del genoma social a través de estándares de desarrollo integral” con las megatendencias mundiales, en primer lugar establezcamos el concepto de cada una de ellas:

Entendamos por Globalización a la creciente relación e intercambio de procesos políticos, económicos, sociales, culturales, tecnológicos y ambientales entre los diferentes países y sociedades, sin importar sus actuales límites geográficos o territoriales. Tratados de libre comercio, comercio electrónico mundial, mancomunidades entre países y regiones, redes sociales virtuales globales, acceso e intercambio de información vía Internet sin importar donde uno se encuentre, son algunos de los ejemplos de lo que significa la Globalización.

En cuanto al concepto de Liberalización, nos referimos a la cada vez más evidente práctica de los seres humanos de poder ejercer su autonomía o libertad de decisión y expresión en cuanto a sus opciones económicas, espirituales, sexuales, ideológicas, políticas, artísticas, etc., sin que existan normas o leyes explícitas o implícitas que las condicionen o restrinjan. Como ejemplos de la ocurrencia de esta megatendencia tenemos la liberalización de la economía mundial, la cada vez mayor tolerancia social para que las personas ejerzan su opción sexual, la mayor libertad de expresión, entre otras.

En relación a la Creatividad, este concepto se refiere a la tendencia creciente del ser humano de poder crear cada día nuevos sistemas y tecnologías que trasvasan los límites de la imaginación y de lo posible. La informática, la robótica, la nanotecnología, la ingeniería genética, la clonación, la biotecnología, son unos cuantos ejemplos al respecto.  

En lo relacionado a la Virtualización o Digitalización, nos referimos a ésta como la megatendencia por la cual cada día más estructuras y procesos humanos son traducidos a dos dígitos (O y 1) creándose así nuevos sistemas que simulan, sintetizan, traducen, reproducen y recrean la realidad en forma virtual. Correo electrónico, computadoras y sistemas operativos, sistemas de comunicación multimedia, animaciones en 3D, simuladores de procesos, video juegos, incluyendo el desarrollo del propio Internet y las redes sociales virtuales, son ejemplos de esta megatendencia mundial.

Por último, y a estas alturas, la megatendencia del Empoderamiento la podemos definir como el proceso creciente de descentralización de recursos y competencias hacia cada ser humano con el fin de que sea éste quien ejerza realmente el poder de controlar y guiar su propio destino, sin tener que estar supeditado a las decisiones respecto a su desarrollo por parte de algún nivel jerárquico o de mayor poder, incluyendo entre estos al Estado. El creciente protagonismo de la mujer en todos los campos, la descentralización de las estructuras del estado, el downsizing o achatamiento de las empresas, la creación de autoservicios, incluyendo los cajeros automáticos, son ejemplos de este proceso mundial.

Pues bien, bajo un enfoque sistémico, hologramático y recursivo resulta también muy importante ver las relaciones y sinergias que existen entre todas las megatendencias, que se potencian unas a otras. Sin embargo, de todas estas, el nuevo paradigma del modelaje del genoma social a través de estándares de desarrollo integral, es el que potenciaría las megatendencias de Empoderamiento  y Virtualización, como procesos que vienen permitiendo a la variedad de las personas del planeta aprovechar de mejor manera los aspectos positivos y controlar los aspectos negativos que las otras megatendencias producen en su desarrollo, en función de sus necesidades y aspiraciones.

Por ello, estas dos mega tendencias son las que están permitiendo que las grandes brechas, exclusiones e inequidades existentes a nivel de la humanidad desde el punto de vista de su desarrollo se vayan cerrando de manera más rápida, efectiva y sostenible, por la propia acción de las personas empoderadas a nivel de sus espacios y redes sociales, aspecto que no podría ser logrado si los procesos de desarrollo solo dependieran de la acción del Estado y la Sociedad Civil, por más concertación que exista.

Si a todo ello, agregamos la implementación del nuevo paradigma de “modelaje del genoma social a través de estándares de desarrollo integral”, el nivel de conciencia que dichos estándares estarían generando en la humanidad como expresión de un gran genoma social global, produciría una enorme negentropía y sinergia positiva nunca antes vivida a nivel mundial que catalizaría todos los procesos de desarrollo en forma armónica, lográndose un proceso de desarrollo humano y bienestar integral nunca antes imaginado, pero quizás sí profetizado por muchos visionarios en el mundo.

Por ello, la importancia de que este nuevo paradigma lo podamos aplicar primordialmente en las poblaciones consideradas pobres, marginadas, o excluidas, con el fin de que sean ellas quienes aprovechen las oportunidades existentes en su micro entorno y en los propios procesos que se encuentran detrás de las megatendencias mundiales.

El paradigma del genoma social y las megatendencias como Plan de Dios

Finalmente, a manera de corolario del presente libro, y solo con el afán de filosofar un poco al respecto, si nos abstrajéramos de nuestro papel terrenal como emprendedores sociales, y tratáramos de analizar las grandes megatendencias mundiales desde el paradigma Teológico para los que somos creyentes de la existencia de un Dios, o desde el paradigma de la teoría de Sistemas, Caos y Complejidad para quienes no lo son, resulta en cierta manera sorprendente ver cómo estas megatendencias mundiales vienen generando procesos sinérgicos, negentrópicos y recursivos en cuanto al desarrollo de la humanidad en general.

Es así que como parte del proceso de Globalización, el nuevo paradigma nos permite tomar conciencia de que nosotros como seres humanos, una expresión hologramática de todo nuestro universo todavía inexplorado y desconocido, lo cual nos permitiría entender nuestra existencia como una expresión de nuestra capacidad de Ser seres Universales; la Liberalización de nuestra capacidad de Ser seres Libres; la megatendencia de la Creatividad nuestra cualidad de Ser seres Creadores; la Virtualización de Ser seres virtuosos y el Empoderamiento la capacidad de Ser seres Poderosos; entonces a manera de resumen podríamos expresar:

“Ser Poderoso, Virtuoso, Creador, Libre y Universal”… es decir, “Ser imagen y semejanza de Dios”, principios los cuales se constituyen en el principio y el fin del Plan Creador de Dios para quienes creemos en su existencia, o podrían ser expresiones del principio hologramático y de recursividad del universo expresados en las Teorías de Sistemas, Caos y Complejidad, y últimamente desde la nueva Teoría Cuántica, desde una interpretación puramente agnóstica.

Pues bien, más allá de esta interpretación epistemológica que podamos hacer de las megatendencias mundiales, debemos reconocer que las interacciones entre todos estos procesos estarían generando un ordenamiento mundial, cuyas consecuencias, establecidas por los propios futurólogos, serían un desarrollo humano integral y armonioso jamás imaginado. Lo cual aunque no lo creamos ya viene empezando a suceder, faltando solo poner de nuestra parte para que ello se de más pronto, pues nuestra capacidad de modelar el “Genoma Social” como parte de nuestra propio espacio y red de emprendedores sociales puede marcar la gran diferencia para catalizar el desarrollo de la humanidad en su conjunto, cual “Efecto mariposa” generando negentropías y sinergias positivas para toda la humanidad.

“Tan solo me gustaría conocer los pensamientos de Dios…pues el resto son solo detalles”.
Albert Einstein.


“Hay dos cosas infinitas: el universo y la estupidez humana…y del universo no estoy seguro”.
Albert Einstein.


[1] Peter F. Drucker, Los desafíos de la gerencia para el siglo XXI, Grupo Editorial Norma S.A. 1999
[2] Alvin Toffler, La Tercera ola, Plaza & Janes. S.A.. Editores. 1980
[3] John Naisbitt, Megatrends 2000. Ten New Directions for the 1990s. William & Morrow Company Inc. 1990


CAPÍTULO 11: EL RETO DE MODELAR EL GENOMA SOCIAL A NIVEL TERRITORIAL Y GLOBAL

Para ser exitosos en la implementación de este nuevo paradigma de modelaje del genoma social mediante estándares de desarrollo integral a gran escala, primero debemos entender que somos parte de un supra-sistema con subsistemas organizacionales (Instituciones Públicas, Organizaciones No Gubernamentales, Empresas, Organizaciones Sociales de Base ,Barrios, Comunidades, Familias, etc.) todos los cuales tenemos una cultura o comportamiento organizacional que reproduce, sustenta y defiende el paradigma asistencialista vigente.

Por ello el reto no está solo en concebir un nuevo paradigma que modele y cambie el genoma social de las personas a través de procesos por implementar en algunos espacios o células sociales, sino también en generar una estrategia de cambio y expansión para poder implementar este nuevo paradigma de desarrollo humano integral a mayor escala considerando la resistencia al cambio propia del paradigma asistencialista.

Por lo tanto, primero es necesario develar las deficiencias del actual paradigma en el abordaje de los problemas sociales a nivel territorial, el cual está relacionado al diseño y concertación de Políticas Públicas y al hecho de querer implementarlas a través de Planes Estratégicos o Planes Sectoriales que toman la forma de Planes Nacionales, Regionales y Locales de Desarrollo, los cuales se busca que sean diseñados e implementados en forma concertada y participativa.

En cuanto al diseño y concertación de Políticas Públicas, es muy conocido y loable el esfuerzo de las organizaciones del estado y de la denominada Sociedad Civil de tratar de concertar las mismas con base en problemas considerados prioridades nacionales, regionales o locales, según el nivel de gobierno donde se actúa. Sin embargo, es conocida también la falta de eficacia en su implementación, lo que al final establece que este tipo de procesos sean “grandes activismos políticos” que no conducen a resultados concretos y efectivos.

Experiencias conocidas como “Acuerdos Nacionales” o “Políticas Nacionales Concertadas en cuanto a Niñez, Adolescencia y Juventud”, “Planes Nacionales contra la Desnutrición Infantil”, entre un sinnúmero de acuerdos suscritos y firmados por otro un sinnúmero de agentes participantes, son finalmente documentos que adolecen de mecanismos eficaces de implementación y medición de resultados concretos, más allá de lo que algún agente participante logra hacer como parte de su propia misión institucional.

Es más, incluso dentro de los propios políticos y actores de la sociedad civil que participan de los procesos de concertación de políticas públicas, muchas de las prioridades establecidas no son compartidas pero sí aceptadas, existiendo por ende procesos implícitos de negociación e incidencia para que dichas políticas públicas consideren en su propuesta al menos parte de los intereses y mandatos institucionales de los propios agentes participantes.

Todo ello se agrava en su factibilidad de implementación, cuando asume la conducción una nueva autoridad política que no participó del proceso en su momento, desconociendo todo lo concertado, aunque existan documentos de compromiso o pactos firmados por todos los agentes participantes en su momento.

Por otro lado, es también conocido el esfuerzo de concertación que se hace en el proceso de diseño e implementación de “Planes de Desarrollo” o “Planes Sectoriales”, muchos de los cuales culminan siendo también documentos archivados en los gabinetes de alguna Municipalidad, Gobierno Regional o Ministerio. Entre las principales causas que explican esta ineficacia operativa, están siempre la falta de presupuesto para muchas de las actividades o proyectos propuestos; el cambio de autoridades o funcionarios que respaldaban política o técnicamente la implementación del plan; la falta de capacidades técnicas para implementar los proyectos; entre otras justificaciones o “Efectos Mariposa” existentes.

En el mejor de los casos, los “Planes de desarrollo” que llegan a implementar parcialmente algunas de sus actividades, lo hacen a través de algunos proyectos de inversión que en su mayoría están relacionados con la construcción de infraestructura básica. Esto, debido a que esas obras son muy valoradas tanto por los políticos como por la población, aunque su construcción no contribuya a la solución del problema social que fue la base de su justificación, lo cual es parte del paradigma vigente.

Sin embargo, en los casos en que se llega a implementar algún proyecto de desarrollo social que no se limita tan solo a la construcción de infraestructura, estos solo se orientan a tratar de contribuir a solucionar algún problema social considerado como prioritario en su momento, con base en un conjunto de actividades formuladas como parte de un “Marco Lógico” establecido dentro del paradigma vigente. Lo cual como sabemos no llega a abordar la real complejidad del problema social que se pretende resolver, siendo finalmente las actividades de implementación del proyecto activismos que no conducen a resultados concretos.

Por ende la gran mayoría de proyectos de desarrollo social, sean implementados en forma centralista o descentralizada, no muestran al final logros específicos en cuanto a la solución de los problemas complejos que pretendían ayudar a resolver, justificando sus gastos tan solo por el conjunto de actividades realizadas (infraestructura construida, charlas, talleres, spots radiales, reuniones de coordinación, etc.) y los gastos de operación y administración incurridos (remuneraciones, pasajes, viáticos, refrigerios, impresiones, etc.) amparándose nuevamente en la justificación ya conocida por todos nosotros que la solución de los problemas sociales es a largo plazo.

Sin embargo, es necesario aclarar que en el marco del nuevo paradigma de modelaje del genoma social propuesto para el abordaje de la complejidad y el caos, todo lo anteriormente expresado son tan solo justificaciones de la ineficacia e ineficiencia del paradigma vigente. Aunque se contara con el respectivo presupuesto y el respaldo político para implementar todas las actividades de los planes o proyectos de desarrollo del actual paradigma, incluso de manera descentralizada a nivel local, estos no llegarían a solucionar los problemas priorizados, dado que esta forma de gestión simplista y reduccionista del desarrollo social no considera ni de lejos la posibilidad de administrar la variedad de procesos necesarios para resolver los problemas complejos que pretenden contribuir a resolver.

Finalmente, a todas estas limitaciones del paradigma asistencialista actual para resolver los problemas sociales complejos en una escala territorial, se suma la existencia mayoritaria de programas sociales asistencialistas en todos los niveles, los cuales refuerzan el paradigma político y social de la necesidad de depender de las capacidades y recursos del estado, la cooperación internacional, las ONG o las empresas socialmente responsables para poder resolver los problemas sociales de nuestra gente.

Por ende, podríamos llegar a concluir que es este último aspecto el que con mayor fuerza sostiene la vigencia del paradigma asistencialista actual, el cual pese a estar mostrando objetivamente su ineficacia se mantiene y es defendido en sus mecanismos obsoletos de implementación por la mayoría de actores políticos, sociales y la propia población.
Adicionalmente, es necesario observar que incluso las experiencias o mecanismos de gestión descentralizada y participativa tanto de servicios públicos como de programas y proyectos sociales implementados por parte del estado (“Núcleos Ejecutores[1]”, “Asociación Comunidad Local de Administración de Salud (ACLAS)[2]”, entre otros ejemplos), padecen de los mismos problemas de eficacia y eficiencia del paradigma vigente, cuando se trata de abordar problemas complejos, sin embargo son bastante eficaces y eficientes cuando se trata de implementar acciones o soluciones específicas para problemas no complejos (gestión de recursos, construcción de obras, prestación de servicios, atención de reclamos, etc.).
Sin embargo, también hay que reconocer que cuanto más se logre un estado descentralizado, mejores son las posibilidades de que las unidades de gestión descentralizadas puedan administrar los procesos necesarios para abordar la variedad y complejidad de los problemas sociales existentes y lograr mejoras sustanciales basadas en el nuevo paradigma de modelaje del genoma social con base en estándares de desarrollo integral.  

Paralelamente, con el objetivo de establecer una propuesta de expansión territorial del nuevo paradigma, debemos considerar la presencia ineludible del proceso de la globalización, el cual trae consigo formas adicionales de interacción de los determinantes individuales, sociales, culturales, políticos, económicos y ambientales que se encuentran detrás de los problemas complejos. Interacción que va más allá de las fronteras geográficas o políticas establecidas por los países. En este sentido, debemos añadir el planeta tierra en su conjunto como otra de las categorías del concepto de territorio, incluyendo la existencia de líderes que promueven un Estado Global, que cada vez está tomando más protagonismo en las decisiones de política que afectan a todos los países y habitantes de nuestro planeta en su conjunto.

En conclusión, es necesario que contemos con una propuesta territorial de implementación descentralizada del nuevo paradigma propuesto, sobre la base de las necesidades reales sentidas por las personas en un contexto globalizado, teniendo en cuenta algunas de las fortalezas del paradigma asistencialista vigente, que son la tendencia hacia la descentralización de las funciones y competencias del Estado y la predisposición de la gente a concertar y participar en los diversos niveles de organización y gestión del desarrollo humano integral a nivel territorial, como son las Organizaciones de Gobierno (ODGs), las Agencias de Cooperación Internacional (ACIs), las Organizaciones No Gubernamentales (ONGs), las Empresas Socialmente Responsables (ESRs), las Organizaciones Sociales de Base (OSBs), las Organizaciones Comunitarias (OCs) y las propias Familias.


Propuesta de implementación del nuevo paradigma a nivel territorial desde el Estado:

Si queremos contar con un Estado que implemente el nuevo paradigma de modelaje del genoma social por medio de estándares de desarrollo integral, de arriba hacia abajo, este deberá reorientar su actual forma de gestión e implementación descentralizada y participativa de políticas públicas y planes de desarrollo basadas en los siguientes procesos de gestión pública para lograr la expansión territorial del nuevo paradigma:





A continuación describiremos cada proceso de esta propuesta de implementación del nuevo paradigma a nivel territorial:

Formular y traducir las políticas de desarrollo económico, tecnológico, social y ambiental en Estándares Específicos para las familias, barrios, comunidades e instituciones públicas y privadas en forma concertada.

Es por todos los emprendedores sociales muy conocido el esfuerzo que hacemos en el paradigma asistencialista actual de abogar por políticas sociales más inclusivas y equitativas, donde cada vez más se han ganado espacios de concertación para su diseño. Por ello, es muy común hablar hoy en día de Acuerdos Nacionales, Mesas de Concertación, Consejos Participativos, etc. como espacios promovidos para la concertación de políticas públicas sociales.

Sin embargo, también es conocida por todos nosotros la debilidad existente en cuanto a la implementación de estos acuerdos o políticas concertadas, lo cual siempre tiene alguna justificación relacionada con la falta de interés de la clase política y los gobiernos de turno por implementarlas, con la consiguiente falta de recursos por ser éste asignado a otras prioridades y la debilidad de traducir las políticas en planes de implementación concretos, entre otras justificaciones que son propias del paradigma vigente.

Adicionalmente, si analizamos estos procesos desde la óptica de las “Teoría de la Complejidad y el Caos”, aunque se contara con recursos y se llegaran a ejecutar algunos de los planes para la implementación de las políticas concertadas, lo logros obtenidos dejarían mucho que desear en cuanto a la solución de los problemas priorizados que originaron dicha política. Ejemplos de este tipo de iniciativas son “Política de Lucha Contra la Desnutrición Infantil”, “Política de Seguridad Ciudadana”, “Política de Lucha Contra la Pobreza”, “Política de Prevención del Embarazo en Adolescentes”, “Política contra la Violencia Familiar”, por citar un mínimo de casos, que no han logrado ser implementados en la medida que se esperaba.

Por ello, en el nuevo paradigma de empoderamiento por resultados, se promueve que el proceso de concertación se oriente más a traducir los indicadores de desarrollo y las políticas públicas en Estándares de Desarrollo Integral, entendiendo por integral a todos los aspectos o áreas de desarrollo humano a nivel individual, social, cultural, económico, tecnológico, político y ambiental.

Por otro lado, el concertar estándares integrales de desarrollo facilita tremendamente los procesos de concertación, puesto que todos los Actores o Grupos de Interés pueden ver reflejados sus mandatos o intereses en un conjunto de estándares que deben ser propuestos por ellos mismos. Estos estándares deberían ser aceptados por todos los agentes de concertación, dado el principio del paradigma de empoderamiento, donde serán las propias personas, familias, barrios, comunidades, instituciones de servicios, etc. quienes tengan la libertad de tomarlos o no en cuenta, para su mejora o logro, de acuerdo a sus reales necesidades y sueños.

En este sentido, la mayor discusión con los Agentes de Concertación se centrará en la pertinencia de los estándares propuestos con base en el contexto y la diversidad cultural y social de la población. Por lo tanto estos estándares deberán ser formulados según los diferentes niveles de gobierno, donde los estándares globales deberían ser comunes para todo el planeta, los nacionales para todo el país, los estándares regionales pertinentes al ámbito y contexto regional y los estándares locales pertinentes a la realidad socio cultural existente en cada distrito.

Para ello, los procesos de concertación de estándares de desarrollo integral se deberán dar en todos los niveles de gobierno, con la participación de sus respectivas autoridades políticas y sectoriales, ONGS, ESRs, OSBs, Familias, etc., según corresponda.

Otra de las ventajas de concertar estándares de desarrollo integral es que a pesar de los cambios políticos que se suelen dar en todos los niveles de gestión territorial, los programas, proyectos o procesos de cambio siempre estarían ligados al logro de dichos estándares, aunque haya cambio de prioridades políticas dados los intereses o mandatos que traen consigo los nuevos actores políticos que entran a operar en un determinado territorio.


Implementar y promover proyectos de inversión públicos y privados para mejorar los Estándares Específicos de Infraestructura y Servicios económicos, tecnológicos, culturales, sociales y ambientales propuestos a nivel de cada unidad de gestión territorial.

En el nuevo paradigma de modelaje del genoma social, el hecho de contar con estándares concertados en los diversos niveles de gobierno es un aspecto sumamente estratégico para la priorización, formulación e implementación de planes de inversión de carácter público y/o privado orientados al logro de resultados que generen un mayor impacto y desarrollo.

El hecho de haber concertado un conjunto de estándares de desarrollo integral a nivel territorial, no solo permite priorizar inversiones por parte de los gobiernos para aquellos estándares que por su magnitud y necesidad requieren de mayores inversiones para lograrlos, sino también genera automáticamente sinergias con la Cooperación Internacional, ONGs o ESRs, ya que éstas orientarán sus recursos hacia proyectos de inversión para lograr los estándares concertados que están dentro de su línea de interés o mandato social. En este contexto, las alianzas público-privadas para inversiones de gran envergadura son más posibles y efectivas.

A manera de ejemplo, los estándares que requerirán de proyectos de inversión en infraestructura y tecnología a nivel Global, Nacional o Regional serán aquellos que estén relacionados con el acceso a medios de transporte e infraestructura vial, disponibilidad de medios de comunicación, de servicios de salud y educación de alta complejidad, disponibilidad de fuentes energéticas y recursos hídricos, entre otros.

Para el nivel local, los proyectos de inversión estarán más focalizados en los estándares relacionados con la disponibilidad y mejora de la calidad de los sistemas locales de saneamiento básico, seguridad ciudadana, sistemas de riego, servicios de salud del primer nivel de atención, instituciones educativas de educación básica, entre otros.

En este sentido, el nuevo paradigma de modelaje del genoma social basado en la gestión de estándares de desarrollo integral permitiría un mejor proceso de asignación presupuestal del gasto público orientado hacia resultados (estándares) y la consecuente evaluación del desempeño de las instituciones públicas, y por qué no también de los programas o proyectos financiados por la Cooperación Internacional, las ONGs y las ESRs, dados los estándares requeridos en su ámbito de intervención.

Promover y asignar recursos para que cada familia, barrio, comunidad e institución de servicio pública y privada se autoevalúe e implemente sus propios procesos de mejora contínua para lograr alcanzar los mayores niveles posibles en cuanto a sus Estándares de desarrollo económico, tecnológico, social y ambiental.

Para poder hacer realmente efectivo el paradigma de modelaje del genoma social en su real magnitud, es necesario también que el Estado y la Sociedad Civil transfieran el poder a la variedad de la población con el fin de que ésta sea la que genere los cambios necesarios para resolver los problemas de la complejidad.

En este sentido, y con el fin de garantizar resultados y lograr eficiencia dentro del nuevo paradigma, si bien la transferencia del poder (competencias y recursos) debe hacerse en forma individual a cada actor social (familia, comunidad, barrio, institución de servicio, etc.), estos a su vez deben estar necesariamente organizados o agrupados en redes sociales de apoyo e inter-aprendizaje, y haber requerido los recursos en función de un proceso previo de autoevaluación de sus estándares de desarrollo integral y la formulación de sus propios procesos o planes de mejora en función de sus aspiraciones, prioridades y reales capacidades.

Para lograrlo, tanto los Gobiernos Locales como las ONGs y ESRs se constituyen en fuentes de empoderamiento, dadas sus capacidades de asistencia técnica y disponibilidad de recursos, los cuales debe ser reorientados para promover “de abajo hacia arriba” que cada actor social implemente sus propios procesos hacia el logro de sus estándares de desarrollo integral, dejando de lado los proyecto de desarrollo social activistas y asistencialistas implementados actualmente de “arriba hacia abajo”.

Si bien hay que reconocer, que incluso en el nuevo paradigma de modelaje del genoma social a nivel territorial podría haber de inicio una cierta carga asistencialista, esta es mucho menor que la actualmente promovida en el paradigma asistencialista. La diferencia adicional es que el nuevo paradigma está orientado hacia el logro de resultados concretos (estándares) por parte del esfuerzo de cada actor social, lo cual promueve una actitud de éxito y una mayor auto confianza en que “sí puede lograr todo lo que quisiera lograr”, generando su propio “Ciclo de Mejora Contínua”, recurriendo cada vez menos al apoyo que pudiera recibir de agentes externos.  


Monitorear y brindar reconocimiento por las mejoras de los Estándares de desarrollo económico, tecnológico, social y ambiental logrados a nivel de las familias, barrios, comunidades e instituciones públicas y privadas.

Con el objetivo de lograr la sostenibilidad política y social del nuevo paradigma a nivel territorial, es necesario promover en primer lugar procesos de reconocimiento social con base en las mejoras y logros alcanzados por parte de cada uno de los actores sociales que los motive a seguir mejorando y desarrollando, y por otro lado, brindar reconocimiento político a los agentes promotores de los cambios, sean estos Autoridades de Gobierno, Cooperación Internacional, ONGs o ESRs, para que sigan apostando por esta forma de desarrollo integral y sostenible.

Con el fin de brindar reconocimiento social a los actores sociales, el nuevo paradigma ofrece hasta tres fuentes para lograrlo: primero, el auto reconocimiento de cada actor social hacia sí mismo por sus mejoras y logros; segundo el reconocimiento brindado por su red social en la medida que ésta evidencie dichos logros en sus integrantes; y tercero el reconocimiento que los agentes promotores pueden dar a los actores que han venido apoyando.

Al ser el auto reconocimiento social una consecuencia natural de los procesos implementados bajo el nuevo paradigma, se podría pensar que este no requiere implementar otras metodologías o herramientas para lograrlo. Sin embargo, el promover que los actores que ya lograron mejorar sus estándares brinden asistencia técnica a quienes todavía no lo lograron es uno de las metodologías más efectivas para lograr altos niveles de motivación interna y desarrollar el liderazgo natural de cada persona.

En cambio, para lograr el reconocimiento por parte de las propias redes sociales, sí es necesario promover al menos metodologías o herramientas que permitan que los actores sociales interactúen y compartan sus experiencias dentro de sus propias redes. Para ello, organizar encuentros, difundir boletines informativos, o crear un espacio web para ello, son metodologías y herramientas que pueden ser perfectamente válidas para este fin.

Adicionalmente, lograr que los agentes promotores sean quienes brinden algún reconocimiento social a quienes apoyaron es también una fuente importante para catalizar los procesos de empoderamiento tanto a nivel social y político, por cuanto este tipo de reconocimiento no solo genera motivación en los propios actores sociales, sino también retroalimenta el apoyo social que los actores le brindan su respectivo promotor, lo cual puede ser válidamente canalizado desde el punto de vista político, según el interés de cada agente al respecto. Promover actos públicos de premiación, realizar publicaciones en prensa o medios de comunicación de los logros de los actores sociales, etc. son metodologías que implementan este proceso a nivel territorial.

Finalmente, brindarse reconocimiento político entre los propios agentes de gobierno según niveles de gestión territorial, es también una muy buen práctica de gobierno en un sistema descentralizado y democrático, con el fin de generar mayores sinergias en función del desarrollo territorial de la población. Esto puede implementarse a través de inauguraciones conjuntas, anuncio conjunto de proyectos y logros, etc., aunque quizás debamos reconocer que éste podría ser el proceso más utópico dentro del nuevo paradigma, pero sin embargo no el más importante dado el poder existente en la variedad de las personas que no son de la clase política.

Uso de las Tecnologías de Información y Comunicación para catalizar estos procesos a escala territorial

El uso de la TICs es también un proceso de empoderamiento sumamente importante para el logro de la máxima eficiencia posible en la implementación y expansión del nuevo paradigma por parte del estado a nivel territorial. Algunos de los ejemplos de cómo las TICs llegan a catalizar o impulsar el nuevo paradigma a nivel territorial son:

·       Publicar los estándares concertados según niveles de gestión territorial a través de Internet, y que estos se hagan más públicos a través de los medios de comunicación.
·       Monitorear los avances en la implementación proyectos de inversión vía Internet mejorando los niveles de transparencia y rendición de cuentas al respecto
·       Disponer de fuentes de información y manuales on-line para la implementación de procesos y mejora de los estándares por parte de los actores sociales, con el fin de reducir el asistencialismo y sus costos relacionados.
·       Facilitar los procesos de autoevaluación y monitorear los estándares que viene logrando cada actor social con el fin de brindar reconocimiento social propio o externo.
·       Contar con un Sistema Web de Información Gerencial (SWIG) que monitoree la mejora de los estándares e indicadores de desarrollo integral a nivel territorial.
·       Permitir a las personas y sus redes sociales crear y publicar sus propios estándares de desarrollo integral
·       Realizar procesos de evaluación externa on-line con fines de acreditación o certificación de estándares con base en los datos proporcionados por los actores sociales.
·       Etc.

Como podemos observar el proceso de expansión territorial del nuevo paradigma de empoderamiento social por estándares es similar al proceso aplicado a nivel de las personas y sus espacios sociales, reflejando así la concepción hologramática y recursiva de la estrategia propuesta para el abordaje de la complejidad.

 Rol de la Cooperación Internacional, las ONGs y las ESRs en la implementación del nuevo paradigma:

Sin lugar a duda los recursos provenientes de la Cooperación Internacional, las ONGs y las Empresas Socialmente Responsables son una fuente que puede ayudar a implementar e impulsar el nuevo paradigma de modelaje del genoma social a través de estándares de desarrollo integral, reorientando muchas de las estrategias asistencialistas y activistas, que la mayoría de las veces están dirigidas a la solución de problemas específicos basados en proyectos diseñados a través de “Marcos Lógicos” que atenúan el poder de la variedad.

Para este fin, no debemos ignorar que toda organización que tiene como objetivo promover desarrollo social, tiene sus propias políticas y mandatos, ligados a intereses de diversa índole, por lo que debemos promover que dichos intereses se conecten con los Estándares de Desarrollo Integral que queremos alcanzar, lo cual puede ser logrado a través de los procesos de concertación en el nivel territorial que corresponde.

En este sentido, más que concertar problemas prioritarios, políticas y planes de desarrollo a nivel distrital, regional, nacional o global, lo cual se hace en el actual paradigma asistencialista vigente, lo que se debe concertar son los Estándares de Desarrollo integral que se quisieran lograr a nivel de los individuos, las familias, los barrios, las comunidades y las instituciones de servicios públicas y privadas.

Luego de ello, cada entidad de Cooperación u ONG o ESR puede elegir apoyar la mejora de determinados estándares en forma específica o en conjunto, en el espacio social o territorial que más le interese hacerlo (familia, barrio, comunidad, institución de servicio público, micro cuenca, distrito, región, país, planeta, etc.) lo cual a diferencia del paradigma activista orientado a problemas, sí estaría contribuyendo a crear las sinergias necesarias para lograr un mayor desarrollo social a nivel territorial en función de resultados (estándares) que se traducirían en la mejora de indicadores en forma integral, producto de los cambios promovidos en la variedad.

Adicionalmente, si gran parte de los fondos de estas fuentes fuesen canalizados para promover que sean las propias familias, barrios, comunidades e instituciones de servicio público o privado quienes implementen procesos de mejora en función de sus estándares priorizados según sus propias necesidades sentidas, el efecto catalizador de los cambios y mejoras a nivel territorial podría ser mucho más eficaz y eficiente, considerando que se estaría disminuyendo el componente asistencialista de las actuales intervenciones en el paradigma vigente.

Rol de los Medios de Comunicación dentro del nuevo paradigma:

Si bien los medios de comunicación son reconocidos por el poder que estos tienen para orientar la opinión pública y generar reacciones de diversa índole, dentro del nuevo paradigma estos medios tienen un rol estratégico por cuanto a través de los mismos se puede promover en forma masiva muchos de los procesos de implementación del nuevo paradigma.

El ampliar la visión de futuro de la población y difundir los estándares específicos que ésta puede aspirar para lograr sus sueños; brindar reconocimiento social a todos los actores que vienen implementando estos proceso y logrando mejoras en sus estándares; vigilar el real cumplimiento por parte del Estado y la Sociedad Civil en implementar programas o proyectos con este enfoque, etc., son algunas de las acciones que los medios de comunicación pueden implementar en forma masiva.

Rol de las Universidades e Institutos Superiores dentro del nuevo paradigma:

Por otro lado, las Universidades e Institutos Superiores son espacios donde es necesario incidir con el fin de preparar recursos humanos capaces de implementar y transmitir el nuevo paradigma, así como mejorar e innovar las metodologías y herramientas para su implementación exitosa en todos los espacios o campos del desarrollo humano.

En este sentido, todo profesional que egrese de una universidad o instituto debe estar en condiciones de diferenciar las implicancias y posibilidades de éxito de su forma de intervenir en la sociedad, bajo el enfoque de uno u otro paradigma.

El incorporar en la estructura curricular el estudio y análisis de las teorías de sistemas de caos, complejidad y teoría cuántica, son algunas acciones que ayudarían en la implementación de este nuevo paradigma.

Vigencia del antiguo paradigma asistencialista orientado a la solución de problemas

Finalmente, y a modo de reflexión, a estas alturas podríamos preguntarnos: ¿Será ético y socialmente responsable seguir financiando y promoviendo proyectos concebidos en el antiguo paradigma activista y asistencialista?... es aquí donde cada uno de nosotros como emprendedores sociales tenemos la respuesta, sin embargo hay que precisar que el paradigma asistencialista mantiene su vigencia cuando se trata de dar solución inmediata a problemas sociales específicos y urgentes, que son necesidades realmente sentidas por la gente.

Ejemplos al respecto serían aquellos problemas que ponen en riesgo la vida o seguridad de las personas, ocasionados por inclemencias o desastres naturales o causados por la mano del hombre, tales como la hambruna, la destrucción de viviendas o servicios públicos, la atención de desplazados, las epidemias o pandemias, entre otros.

Es en estos casos donde realmente sí se requiere de una asistencia directa y efectiva, que solucione el problema considerado urgente, para luego en forma paralela implementar el paradigma del modelaje del genoma social a través de estándares con el fin de promover el desarrollo integral de estas personas.

“Si queremos promover el máximo desarrollo humano integral posible, no hay que regalar el pescado… tampoco hay que regalar la caña y enseñar a pescar… solo hay que dejar que las personas sueñen despiertas con un mundo mejor y hagan todo lo que puedan para lograrlo”.
Carlos Guarnizo


[1] Estrategia del Fondo de Compensación y Desarrollo Social (FONCODES) del estado Peruano, que permite que el estado transfiera recursos económicos a organizaciones de la comunidad reconocidas como “Núcleos Ejecutores” para que sean ellas mismas las que implementen un determinado proyecto de inversión social aprobado por el estado.
[2] Un ACLAS (Asociación Comité Local de Administración en Salud) es un órgano de cogestión constituido en forma de una asociación civil sin fines de lucro con personería jurídica, conformada por personas naturales o jurídicas representativas de una localidad con fines de colaborar con el Estado Peruano en la administración descentralizada de los recursos públicos destinados a la prestación de Servicios de Salud.



CAPÍTULO 10: PROCESO DE MODELAJE DEL GENOMA SOCIAL A TRAVÉS DE ESTÁNDARES DE DESARROLLO INTEGRAL

Con el fin de poder llevar a la práctica la implementación del nuevo paradigma de modelar el genoma social a través del uso de estándares de desarrollo integral, uno de los principales aspectos a tener en cuenta, a diferencia del paradigma asistencialista, es por un lado, enfocar nuestras acciones en concordancia con las verdaderas aspiraciones y necesidades sentidas por las personas, cuya búsqueda de satisfacción se convierta en el motor que motive o impulse a las mismas a comenzar a implementar acciones para lograr su desarrollo; y por otro lado, orientar los procesos de mejora para ser implementados por las personas hacia el logro de resultados concretos, más que a la simple solución de problemas.

Por ello, otra de las grandes diferencias adicionales entre el paradigma asistencialista de solución de problemas y el nuevo paradigma de modelaje del genoma social por resultados (estándares) es la forma de administrar su implementación.

En el paradigma asistencialista, los procesos se administran o implementan de “arriba hacia abajo”, dado que es el promotor del proyecto o programa quien en función de lo que quiere lograr, establece objetivos, metas y prescribe un conjunto de estrategias y actividades lógicas a ser implementadas a favor de los beneficiarios, al igual que ciertas actividades de supervisión, monitoreo y evaluación para controlar su cumplimiento. Si bien, algunas veces existe actividades que se hacen con la participación de los beneficiaros, estas actividades se dan estrictamente bajo lo establecido en el “Enfoque de Marco Lógico” del programa o proyecto.

En este sentido, dentro del paradigma del modelaje del genoma social por estándares, si bien los resultados (estándares de desarrollo integral) pueden ser promovidos “de arriba hacia abajo”, como parte de un mecanismo de generación de una visión compartida, por otro lado, todas las metas y acciones específicas que deben ser realizadas por las personas o equipos para el logro de dichos estándares son implementadas “de abajo hacia arriba”, por el protagonismo de las personas dentro de sus propios espacios y redes sociales.

Adicionalmente, en el paradigma de empoderamiento social por estándares de desarrollo integral, los procesos de supervisión son reemplazados por procesos de inter-aprendizaje y los procesos de monitoreo y evaluación externa, por procesos de monitoreo interno hechos por la propia red social y por procesos de auto – evaluación de resultados realizados por cada integrante de la red, en función de los estándares de desarrollo integral que deben ser logrados.

En este contexto, se puede afirmar desde ya que el clásico modelo de escalas jerárquicas de supervisión, monitoreo y evaluación para el control del desempeño de las personas, así como de los procesos y los resultados en una organización o sistema, queda como parte del antiguo paradigma de gestión asistencialista de la era industrial, que se torna obsoleto desde la perspectiva del paradigma de empoderamiento social por estándares de desarrollo integral.

El hecho de que las personas puedan traducir todas sus necesidades en aspiraciones y sueños concretos (estándares de desarrollo integral) factibles de ser logrados en el tiempo, es por un lado fundamental para que las personas sientan que lo pueden lograr con base en sus propias capacidades y recursos, tanto propios como existentes en su entorno inmediato. Por otro lado, es una de las formas más eficaces para que las personas u organizaciones que trabajamos en el campo del desarrollo social conectemos nuestros propios mandatos o aspiraciones con las propias aspiraciones y necesidades realmente sentidas por las personas a las que queremos apoyar a desarrollar.

Así mismo, debemos entender que en el nuevo paradigma, el apoyo y reconocimiento social es un factor fundamental que motiva a las personas a seguir implementando acciones para mejorar por sus propios medios, siendo este aspecto a su vez una necesidad humana trascendente, pues todas las personas necesitamos pertenecer a un determinado grupo social y ser reconocidas por lo que somos y por lo que hacemos, eso es la base de nuestra identidad social, autoestima y motor de nuestro liderazgo y emprendimiento.

Por ello, el proceso de empoderamiento por estándares de desarrollo integral debe implementarse considerando a las personas dentro de su propio Espacio o Célula Social en la que estas se desenvuelven día a día (Familia, Lugar de Trabajo, Centro de Estudios, Organización Social, Barrio, Comunidad, etc.). En este sentido, cada espacio social se constituye en la “Célula Social” capaz de replicar y producir lo propuesto a nivel de sus estándares de desarrollo integral como expresión de su código genético o genoma social. 

En este sentido, la metodología que implementa este nuevo paradigma tiene cuatro procesos que deben ser implementados en cada espacio o célula social y un motor catalizador de dichos procesos como parte de una propuesta de desarrollo basado en un modelo sistémico y hologramático de mejora y aprendizaje contínuo.

Los procesos que deben ser implementados en cada espacio o célula social son los siguientes:

1.     Potenciar los sueños o aspiraciones de las personas a través de metas o estándares específicos de desarrollo integral.
2.     Promover que las personas se auto-evalúen a través de los estándares propuestos y prioricen los que pueden mejorar por sus propios medios.
3.     Motivar a que las personas implementen acciones efectivas para mejorar los estándares priorizados con apoyo de sus propias redes sociales.
4.     Brindar reconocimiento social a las personas por las acciones y los logros alcanzados en la mejora de sus estándares de desarrollo integral.

Adicionalmente, el incorporar el uso de las Tecnologías de la Información y Comunicación (TICs) como parte de la nueva estrategia, se constituye hoy en día una herramienta imprescindible que nos permite catalizar tanto el proceso de modelaje del genoma social a través de la gestión de estándares de desarrollo integral, así como administrar la inmensa variedad de procesos y resultados que se generan por la propia acción de las personas y sus redes sociales en su afán de lograr alcanzar dichos estándares.  Adicionalmente, el uso de las TICs nos permite lograr la mayor eficiencia, eficacia y control de los proceso de implementación del nuevo paradigma.

En este sentido podemos afirmar que: “La información que fluye a través de las TICs se constituye en el conocimiento y aprendizaje genético que un sistema social desarrolla y comparte entre sus propias células sociales”. Al igual que  el sistema nervioso y endócrino que permiten relaciones de intercambio de información y procesos entre todos los órganos y sistemas a nivel del cuerpo humano, las TICs permiten el intercambio de información y procesos entre todas las personas y organizaciones sociales que conformamos parte del genoma social.

Por ello, podemos considerar que las TICs son el vehículo a través del cual la información del genoma social fluye en forma global con el fin de permitir su evolución y desarrollo en forma más sistémica, sinérgica, recursiva y hologramática.  

El siguiente gráfico ilustra y sistematiza el proceso de implementación del nuevo paradigma de modelaje del genoma social a través de estándares de desarrollo integral:


Procesos para el modelaje del Genoma Social a través de Estándares de Desarrollo Integral




A.     Potenciar los sueños o aspiraciones de las personas a través de metas o estándares específicos de desarrollo integral

Este proceso permite comenzar a modelar el genoma social promoviendo que las personas al interior de sus respectivos espacios sociales expresen sus necesidades en función de resultados concretos (estándares) y logren visualizar nuevos estándares de desarrollo más allá de su propio contexto o entorno actual, lo cual facilita que las personas mejoren su propia visión de futuro y capacidad soñadora, y amplíen la variedad de opciones que tienen para implementar sus procesos de mejora y realización en la vida.

Las personas que sueñan con grandes cosas, tiene mayores posibilidades de desarrollo que las que no sueñan o sueñan poco. Soñar con cosas para lograr en la vida es en sí mismo un facto motivador intrínseco sumamente poderoso para promover la acción en las personas. Dejar de soñar es dejar de crecer, y por ende dejarse llevar tan solo por el contexto o las circunstancias.

Cuanto más grande o visionario es un sueño, más grande será la posibilidad de desarrollo y crecimiento de una persona u organización. Sin embargo, si los sueños no se concretan en metas claras y factibles de ser logradas, estos se convierten tan solo en una utopía que puede llegar a producir un efecto de escepticismo y frustración en las personas, reforzando conductas conformistas y adversas a la posibilidad de soñar con grandes cosas.

Por ello, lograr que las personas traduzcan sus sueños en metas concretas por lograr en todos los campos del desarrollo humano (individual, social, cultural, económico, político, tecnológico y ambiental) lo cual denominamos estándares de desarrollo integral, es un aspecto sumamente importante en la implementación del proceso de moldeamiento o activación del genoma social para abordar la complejidad del desarrollo humano en forma integral.

Así mismo, contar con estándares de desarrollo integral es parte de un proceso que permite traducir los sueños en aspectos concretos, factibles de ser alcanzados y medidos, lo cual desde ya supera la debilidad del paradigma asistencialista actual, cuyo mayor problema radica justamente en su falta de capacidad y claridad para medir los resultados de sus intervenciones en el campo social.

Por otro lado, el contar con un conjunto de estándares de desarrollo integra”, es también una herramienta de comunicación que permite a las personas ampliar su visión de lo que significa desarrollo integral y tomar conciencia de su contribución como sujetos que forman parte de una sociedad, y por el otro el poder autoevaluar su situación actual en relación al nivel de logro alcanzado respecto a cada uno de los estándares, por ende determinar su propio nivel de desarrollo dentro de la sociedad donde evoluciona.

Finalmente, los estándares de desarrollo integral son también una herramienta poderosa que permite traducir las políticas y planes de desarrollo de los gobiernos en aspectos entendibles y factibles de ser implementados y sostenidos por la propias personas u organizaciones sociales, generando así una nueva forma o paradigma de implementar políticas, programas y proyectos públicos haciendo más eficaz y eficiente los procesos de gobernabilidad y desarrollo sinérgico de un territorio, sea este una comunidad, un distrito, una provincia, una región, un país o todo el planeta.

Es por ello que la formulación de estándares de desarrollo integral se constituye en la herramienta operativa que en el nuevo paradigma permiten la modificación positiva del genoma social, al poder articular en forma hologramática y recursiva las aspiraciones y necesidades sentidas por las propias personas, con las necesidades y aspiraciones de desarrollo percibidas o deseadas por los emprendedores sociales o políticos que buscamos resolver problemas y promover el desarrollo de nuestra gente.

Sin embargo, con el fin de que las personas ampliemos nuestra visión de desarrollo, no basta con que seamos expuestas a un conjunto de estándares escritos, es también trascendente que podamos visualizar estándares de desarrollo integral ya logrados, por las personas en espacios sociales con características similares (pares).

Por ello, con el fin de implementar esta etapa del proceso de modelaje del genoma social, se recomienda también que en forma operativa expongamos a las personas que queremos empoderar a visualizar estándares de desarrollo integral ya logrados por sus pares a través de técnicas tales como:

-        Visitas de campo a espacios sociales similares para observar estándares de desarrollo integral ya logrados.
-        Revisión de videos y fotografías de logro de estándares de desarrollo integral en espacios sociales similares.
-        Testimonios de las personas de espacios sociales similares que ya lograron estándares de desarrollo en forma integral.

Debemos enfatizar que los modelos a mostrar, deben ser de pares que han logrado niveles de mejora en la mayoría de sus estándares de desarrollo en forma integral, y no solo alguno de los estándares propuestos por nosotros, puesto que lo que se trata es de ampliar la visión de las personas que queremos empoderar de manera holística, y no solo limitarnos a algún tipo de estándar en específico.


B.     Promover que las personas se auto-evalúen a través de los estándares propuestos y prioricen los que pueden mejorar por sus propios medios.

Esta segunda fase de la estrategia de implementación del nuevo paradigma busca activar los códigos del genoma social (estándares) promoviendo que cada persona contraste su sueño o visión de futuro con su propia realidad y tome conciencia de su protagonismo y contribución social.

Para dar un gran salto hay que, en primer lugar, ver hasta dónde queremos llegar (sueño o visión de futuro) y en segundo lugar, determinar desde dónde debemos tomar el impulso, lo cual usualmente lo definimos con base en la distancia por saltar y nuestra condición física o capacidad para hacerlo. Si vemos que la distancia que queremos lograr (sueño o visión) es muy grande dada la condición física que tenemos (recursos o capacidades) o el espacio que tenemos para dar el impulso (contexto o entorno), debemos buscar una distancia o meta más corta o factible (estándar de corto plazo) o buscar algún apoyo que nos ayude a lograrlo (oportunidad existente en nuestro entorno).

Es por ello, que el lograr que las personas hagan su propio proceso de auto-evaluación en relación a un conjunto de estándares de desarrollo integral que le ayuden a clarificar su visión de futuro, es la parte más reflexiva y autocrítica del proceso de modelaje del genoma social, a partir de la cual, por un lado, se refuerza en cada persona la necesidad de cambio o mejora, y por otro, se genera un nivel de conciencia de su rol social que se traduce en una fuerza de motivación intrínseca que lo empuja a querer dar los saltos necesarios para lograr alcanzar cada uno de los componentes (estándares) de su sueño.

Es bien conocido en la administración, que para lograr el desarrollo, las personas u organizaciones debemos tener definidos y priorizados claramente nuestros objetivos y metas a lograr en el corto, mediano y largo plazo. Por ello el proceso de autoevaluación de estándares debe concluir en un proceso de selección o priorización de los estándares que comenzaremos a mejorar a medida del tiempo.

No obstante, dada la necesidad de que este proceso genere no solamente un componente reflexivo y una fuerza motivadora de tipo individual, sino también un proceso social que los retroalimente y potencie, el proceso de priorización de estándares a mejorar en forma inicial debe ser hecho al interior de la célula o espacio social de las personas que queremos empoderar en función de dos aspectos, por un lado según sus propios intereses y necesidades y por el otro, según sus propios recursos y capacidades

Por lo tanto, metodológicamente, las técnicas que podemos implementar para empoderar a las personas durante este proceso son:

-        Facilitar procesos de concertación de estándares de desarrollo integral, según los espacios sociales existentes, que se traduzcan en listas de chequeo para promover la autoevaluación de las personas.
-        Promover reuniones de autoevaluación de estándares de desarrollo integral de las personas dentro de sus propios espacios sociales.
-        Asesorar a las personas en su espacio social para que reflexionen a cerca de sus estándares actuales en función de lo que quisieran lograr en su visión de futuro.


C.     Motivar a que las personas implementen acciones efectivas para mejorar los estándares priorizados con apoyo de sus propias redes sociales

Una vez que hemos logrado que las personas hayan priorizado los estándares más factibles de ser alcanzados o mejorados en relación a sus propios intereses, recursos y capacidades, el siguiente paso es promover que éstas implementen acciones efectivas para lograr mejorar dichos estándares.

Entendamos por acciones efectivas, aquellas acciones que están directamente relacionadas con mejorar el estándar priorizado (eficacia) con la menor cantidad de recursos posibles (eficiencia). Para lograrlo, nuevamente es necesario superar las limitaciones del paradigma asistencialista vigente, en el cual muchas actividades que implementamos son solo acciones que, si bien están relacionadas con el propósito que se quiere lograr, no contribuyen al logro de resultados concretos, actividades que hemos denominado activismos.

La ventaja del nuevo paradigma es que dado que el propósito está especificado como resultados sumamente concretos a lograr (estándares), la probabilidad de que las personas implementen acciones activistas para lograrlo es muy baja. Por ello, y con el fin de garantizar la implementación de acciones efectivas se recomienda que sean las propias personas o grupos de personas a cargo del proceso de mejora del estándar quienes propongan las actividades que piensan y pueden realizar para tal fin, lo cual se debe traducir en una agenda de actividades concretas, también denominado plan de mejora.

A diferencia del paradigma asistencialista, son las propias personas quienes, teniendo como meta mejorar un determinado estándar, implementan las acciones necesarias para lograrlo, buscando aprovechar las oportunidades accesibles en su entorno o aquellas a las que pueden acceder a través de sus propias redes sociales.

Es con este fin, que nuestras propias redes sociales se constituyen en el espacio más asequible para encontrar las oportunidades que buscamos. Es más, aunque no encontremos la oportunidad en nuestra red, las propias redes sociales de los miembros de nuestra red pueden ser la fuente de la oportunidad que necesitamos. Por ello, cuanto más grande y genuina es nuestra red social, más grande es la probabilidad de conseguir una oportunidad para lograr alcanzar nuestros sueños.

Finalmente, ofrecer incentivos o reconocimiento social a las personas y sus espacios sociales, es una adecuada estrategia de motivación de las mismas para que emprendan acciones concretas de mejora de sus estándares, mediante el esfuerzo individual y colectivo de sus miembros.  

En este sentido y con el fin de motivar a las personas en la implementación de acciones para la mejora de sus estándares priorizados, las técnicas que se sugieren dentro del nuevo paradigma son:

-        Promover que las personas amplíen su red de contactos sociales a través de su participación activa en eventos o redes sociales a su alcance.
-        Promover que las personas visiten a sus pares que lograron implementar acciones y mejorar el estándar priorizado con el fin de aprender de los mismos.
-        Asesorar a las personas para que accedan a fuentes auto instructivas para la implementación de sus mejoras, tales como guías, manuales, videos, etc. los cuales muchas veces se encuentran publicados en Internet.
-        Establecer incentivos que las personas y sus espacios sociales recibirán en la medida que logren mejorar sus estándares priorizados (cambiar el paradigma asistencialista de regalar recursos a los beneficiaros, por el paradigma de entregarles recursos como reconocimiento social a sus mejoras).  


D.    Brindar reconocimiento social a las personas por las acciones y los logros alcanzados en la mejora de sus estándares de desarrollo integral

Este proceso logra que las personas que queremos transformar refuercen por un lado su propia autoestima y actitud emprendedora, y por otro lado su autoconfianza en que si pueden lograr el sueño o visión de futuro que se han propuesto.

Tanto el auto-reconocimiento de cada persona hacia sí misma, como el reconocimiento de sus redes sociales y de sus propios promotores (Estado, ONG, empresa, etc.) son las fuentes que refuerzan el pensamiento y la actitud triunfadora de las personas en el sentido de “Si lo pude lograr ahora, puedo lograr mucho más”.

Por otro lado, otro factor sumamente motivador que impulsa la autovaloración como parte del proceso de brindar reconocimiento social a las personas, es la posibilidad que ésta tenga de apoyar a otras personas con base en lo que pudo haber logrado, puesto que la necesidad de trascendencia es intrínseca a nuestra naturaleza de ser reconocidos por lo que somos y por lo que hacemos.

Finalmente, el cumplir con entregar en forma pública los incentivos ofrecidos en la etapa anterior, con el fin motivar a las personas a realizar acciones para mejorar sus estándares priorizados, es otro de los aspectos fundamentales para concretar un adecuado proceso de reconocimiento social.

En este sentido, las técnicas más recomendadas para implementar esta etapa del proceso de modelaje del genoma social son:

-        Promover que las personas den a conocer sus logros a su propia red social y sus promotores con el fin de recibir auto reconocimiento social.
-        Brindar reconocimiento público a las personas tanto por iniciar sus procesos de mejora como por los logros alcanzados en cuanto a cada uno de sus estándares de desarrollo.
-        Promover que las personas se conviertan en promotores pares de otras personas que quieren iniciar el mismo proceso (Yachachiqs).


E.     Uso de las TICs para catalizar los procesos de modelaje del genoma social a nivel de las personas y sus redes sociales

Si entendemos que catalizar significa poder acelerar un proceso para obtener los resultados deseados en menor tiempo, entonces el desarrollo de los Sistemas y Tecnologías de la Información y Comunicación (TICs) son hoy en día poderosos catalizadores de los procesos del moldeamiento del genoma social mediante el uso de estándares de desarrollo integral.

El hecho indudable de que las TICs son cada vez más accesibles a todas las personas y la facilidad de que hoy en día podemos encontrar la mayor parte de la información que necesitamos a través del Internet, sumado a la expansión de las redes sociales a través de plataformas virtuales sumamente interactivas e incluso la posibilidad de poder darnos a conocer al mundo a través de blogs personales y videos puestos en portales como Youtube, son oportunidades que podemos emplear para catalizar todas las etapas del proceso de empoderamiento.

En efecto, todos los procesos que proponemos para implementar el nuevo paradigma de modelaje del genoma social, pueden ser llevados a cabo a través del uso de las TICs disponibles hoy en día.

A manera de ejemplo mencionaremos algunas de estas posibilidades:

-        Publicar en la web los estándares de desarrollo integral para su autoevaluación y facilitar la búsqueda y el acceso a fuentes auto-instructivas ya existentes para su mejora.
-        Brindar facilidades para que las personas muestren sus procesos y logros en la mejora de sus estándares a través de fotografías y videos publicados por ellas mismas en la web.
-        Promover que las personas expandan sus propias redes sociales en forma virtual para compartir sus logros y ser más reconocidos.
-        Brindar reconocimiento público a las personas a través de sus redes sociales virtuales.
-        Implementar motores de procesamiento de la información proporcionada por las personas en la web sobre sus procesos y resultados en la mejora de estándares, con fines de monitoreo, evaluación e investigación social.
-        Etc.

Si bien todo este ciclo de procesos para el modelaje del genoma social puede ser implementado de abajo hacia arriba de manera exitosa a partir del trabajo en un espacio social determinado, el mayor reto está en cómo hacer para poder escalar estos procesos a nivel de todo un territorio, donde la estrategia sea parte de una política de implementación de programas sociales más eficaces, eficientes y sostenibles. A continuación presentaremos una propuesta al respecto.